Jeremy Rifkin, reconocido economista y sociólogo estadounidense, aborda la crisis climática global desde una perspectiva innovadora en su último libro, Planeta Aqua. Rifkin alerta sobre el inminente colapso de lo que denomina la “civilización hidráulica”, resultado de la intensificación del cambio climático y la creciente presión sobre los recursos hídricos. Su análisis parte de una premisa fundamental: no vivimos en un “Planeta Tierra” como tradicionalmente lo concebimos, sino en un “Planeta Agua”, donde el agua es el recurso más crítico para la supervivencia de las especies y el funcionamiento de los ecosistemas.
En su propuesta, Rifkin argumenta que será el mercado el principal motor para sacar a la humanidad del atolladero climático. A medida que las energías renovables y las tecnologías limpias ganan terreno, el economista sostiene que la dinámica del mercado desempeñará un papel crucial en acelerar la transición hacia modelos sostenibles. Este enfoque, según Rifkin, se basa en el reconocimiento de que las fuerzas económicas, combinadas con la innovación tecnológica, pueden ser más efectivas y rápidas que los acuerdos internacionales para frenar el impacto ambiental.