Un estudio reciente publicado en Nature Communications ha destacado un problema ambiental significativo: el impacto de los gatos (Felis catus) en la biodiversidad mundial. La investigación revela que los gatos afectan a 2.083 especies, incluyendo aves, mamíferos, insectos y reptiles, de las cuales 347 están en peligro de extinción.
En Canarias, esta situación es particularmente grave. Manuel Nogales, biólogo del CSIC en Tenerife, señala el peligro que los gatos representan para especies endémicas, como los lagartos gigantes de La Gomera y El Hierro. Los estudios en las islas han mostrado el impacto devastador de los gatos asilvestrados en la biodiversidad, incluyendo la caza de especies únicas como el herrerillo canario y el mosquitero canario.
Nogales distingue entre gatos domésticos, callejeros y asilvestrados, todos con instinto cazador. Destaca la necesidad de controlar las poblaciones de gatos, especialmente en áreas de alta biodiversidad, y critica las legislaciones que ignoran el conocimiento científico en favor de filosofías animalistas. Subraya que, aunque las colonias urbanas de gatos esterilizados son una solución temporal, es fundamental buscar soluciones a largo plazo para proteger la biodiversidad.
Este estudio resalta la importancia de equilibrar el amor por los animales domésticos con la protección de especies amenazadas y la conservación del ecosistema.